Catalogan 79 síndromes relacionados con la obesidad

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Un equipo de investigadores canadienses de la Universidad McMaster, en Ontario, acaba de concluir que existen nada menos que 79 causas genéticas que provocan síndromes que son el origen de la obesidad. Algunas de ellas ya son bien conocidas, como el llamado Síndrome de Prader-Willis, el cual provoca un hambre desmesurada y una anómala capacidad para ingerir alimento.

Pero, lo realmente sorprendente es que, según este nuevo estudio, 43 de esos síndromes están tan poco estudiados que ni siquiera se les ha asignado un nombre clínico o científico.

También es cierto que la incidencia de esos factores genéticos no es similar en los 79 casos, y varía de entre 1 caso entre 600 personas a 1 entre un millón.

Pese a ello, los autores del estudio afirman que los estudios con gemelos han revelado que la obesidad tiene un origen genético en más de la mitad de los casos. Por eso, conocer todos estos síndromes que pueden provocarla, ayudará a buscar tratamientos más eficaces.

El estudio fue publicado en la revista Obesity Reviews. Los investigadores examinaron 116 artículos y encontraron que los médicos pueden probar 19 de estos 79 síndromes reportados anteriormente de origen genético, mientras que 11 se han aclarado parcialmente y 27 se han asignado a una región cromosómica específica. Los científicos aún no han sido capaces de identificar las regiones para los 22 síndromes restantes.

En diciembre, Lee Kaplan, director del instituto de obesidad, metabolismo y nutrición del Hospital General de Massachusetts, le dijo al New York Times que hay al menos 59 tipos distintos de obesidad, incluyendo al menos 25 genes que parecen estar directamente relacionados con el riesgo de obesidad. Así que este nuevo artículo sugiere que el número de vínculos genéticos con la obesidad es tres veces mayor.

El autor David Meyre, profesor asociado de la Escuela de Medicina Michael G. DeGroote de la Universidad McMaster, le dijo a CNN que el artículo se enfocaba en formas de obesidad “monogénicas” o “mendelianas”, lo que significa que las personas que portan el gen en cuestión sólo necesitan una mutación para desarrollar la enfermedad. Meyre dijo que estos genes probablemente sólo están presentes en el 0,1 por ciento de las personas obesas en Canadá.

Saber qué genes son responsables de los 79 síndromes no resuelve el problema para las personas que tienen esas condiciones, ni ayuda a tratar la obesidad no genética, que es mucho más común, al menos aún no. Pero Meyre dijo que identificar los genes responsables del aumento de peso es un paso hacia adelante para entender las causas biológicas de la obesidad.

“Si conoces el gen y la función del gen, entonces sabes qué mecanismo biológico es el defectuoso”, le dijo Meyre a CNN. Saber esto le podría ayudar a los científicos a llegar a los tratamientos para los síndromes específicos, así como para las personas cuyo peso no está relacionado con un solo gen. Un ejemplo es la hormona de saciedad leptina, que son producidas por las células grasas del cuerpo. Algunas personas con mutaciones genéticas tienen niveles bajos de la misma, lo que significa que sienten hambre todo el tiempo. El gen responsable de la fabricación de leptina fue descubierto en 1990 y, desde entonces, los médicos aprendieron que conforme la gente pierde peso, sus cuerpos producen menos leptina. Pueden aconsejar a sus pacientes que quieren perder peso, que volver a subir de peso puede no ser un problema de fuerza de voluntad, sino más bien de la fisiología simple. Algunos expertos también están tratando de desarrollar medicamentos para mantener el peso que imitan los efectos de la leptina.

 

Fuente: Vice /CNN


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