Una ley de diciembre de 2016 permite a los farmacéuticos de Kentucky, Estados Unidos, trabajar en colaboración con un médico prescriptor para tratar ciertas afecciones simples, aliviando las salas de guardia. Esto comenzará a implementarse en pacientes que consultan con síntomas de gripe y estreptococo en el condado de Knox.
“Vamos a tomar la presión arterial, la temperatura. Haremos una evaluación completa del paciente y luego haremos las pruebas, ya sea un hisopado de garganta o nasal para determinar si el paciente tiene gripe “, explicó la doctora en Farmacia Jennifer Baker, de la farmacia West Knox, la primera que implementará el programa. “A lo sumo será una consulta de 20 minutos”.
Sin embargo, hoy son pocas las farmacias inscriptas para dar este servicio. La ley exige que las farmacias se conecten con un médico y que completen una capacitación certificada de 20 horas.
Los funcionarios de Kentucky esperan que el próximo año el 20 por ciento de las farmacias del estado puedan ofrecer los nuevos servicios para ayudar a reducir la carga en las salas de guardia.