Los gobiernos deben trabajar más con los farmacéuticos para proporcionar servicios de reducción de daños e involucrarlos plenamente en el desarrollo de cualquier política sobre cannabis medicinal o recreativa (marihuana), dijo la Federación Farmacéutica Internacional (FIP) en una nueva Declaración de Política publicada hoy en el marco del Congreso Mundial que se está desarrollando en la ciudad de Glasgow, Escocia.
“Esta declaración es extremadamente oportuna, dada la creciente cantidad de muertes innecesarias causadas por el uso no médico de opiáceos y otras drogas, y teniendo en cuenta las discusiones cada vez mayores sobre las políticas de cannabis en todo el mundo”, dijo Andy Gray, Vicepresidente de FIP. “La profesión, los farmacéuticos y sus organizaciones nacionales, deben involucrarse activamente con los gobiernos y los políticos a medida que evolucionan estas situaciones. Este es el mensaje clave de la declaración “, agregó el Sr. Gray.
Esta nueva Declaración de Política de la FIP sigue a la publicación del informe de la FIP de noviembre de 2017 que describe los servicios de farmacia en todo el mundo que sirven para reducir el daño de las drogas de abuso. El Consejo de la FIP ha confirmado las especificaciones hechas en el informe de lo que debería incluir un servicio integral de reducción de daños (por ejemplo, el suministro de naloxona) mediante su inclusión en la declaración de política. Este Consejo de la FIP estaba compuesto por representantes de 140 organizaciones farmacéuticas nacionales de todo el mundo.
“Hay pruebas para involucrar a los farmacéuticos, y las farmacias comunitarias en particular, en una amplia gama de actividades de reducción de daños. Y, con respecto al suministro de cannabis para fines médicos, se debe utilizar la experiencia de los farmacéuticos “, dijo Gray.
La declaración de política señala que se podría argumentar, en base a los principios de reducción de daños, que las farmacias son la mejor opción para el suministro de cannabis con fines recreativos. Sin embargo, enfatiza que tal enfoque solo debe desarrollarse en consulta con los farmacéuticos. Se reconoce la fuerte oposición de las organizaciones profesionales al suministro de cannabis recreativo en las farmacias. En particular, FIP dice que las preocupaciones de los farmacéuticos con respecto a sus obligaciones éticas y posición en sus comunidades deben ser cuidadosamente consideradas en el desarrollo de dicha política.