Propietarios de farmacias de Bariloche pidieron al Concejo y al Ejecutivo ser exceptuados de los aumentos de la Tasa de Inspección e Higiene, enmarcados en la nueva Ordenanza Fiscal y Tarifaria. Aducen que el incremento del gravamen, tendrá una “importante incidencia en la rentabilidad del sector” y podría provocar que “se ponga en riesgo el financiamiento de las obras sociales y el stock de medicamentos”. El Colegio de Farmacéuticos de Río Negro, respalda el reclamo.
El “desmedido incremento de la TISH, sumado al histórico desfinanciamiento del sector, podría generar falta de stock”, explicó a ANB el propietario de la Farmacia Dr. Pasteur, Paulo Ruiz.
En ese sentido, graficó: “Puede suceder que uno vaya a la farmacia de turno a las 3 de la mañana y no encuentre el medicamento que necesita”. Así -evaluó- “si se aplican estas cargas tributarias sobre el desfinanciado sector, sólo subsistirán las farmacias chicas”.
Ruiz detalló que el incremento lleva la TISH -aplicada a comercios que venden medicamentos- del 1 por mil al 1 por ciento sobre la facturación. Es de decir que “si uno facturaba 500 mil pesos mensuales, pagaba 500 pesos de TISH y ahora se intenta cobrar 5.000 pesos por el mismo concepto”.
No obstante la brusca suba del gravamen, Ruiz manifestó que “entendemos la compleja situación económica y financiera del Municipio y la necesidad de recaudar, pero nuestro sector sería el más golpeado con esas adecuaciones tributarias”.
En ese sentido, Ruiz explicó que farmacias como la suya, absorben muchos costos porque se ciñen al rubro medicación y restringen el de perfumería -al que se aplica un monto de TISH diferenciado-. “En Bariloche hay gastos extra como el pago de la ‘zona fría’ (a los empleados), en nuestro caso, trabajamos con obras sociales que cubren medicamentos al 100 por ciento, como PAMI o IPROSS. Además, las obras sociales nos pagan recién a los tres meses de efectuada la venta”, explicó y en ese sentido, señaló que las farmacias “no pueden tener ese dinero en la calle” a través del stock.
Y resumió: “Para nosotros el margen de rentabilidad real, no supera el 5 por ciento, y no tenemos forma de trasladar los costos a los medicamentos”, los que tienen un precio sugerido.
El reclamo del sector farmacéutico fue fuertemente respaldado por el Colegio de Farmacéuticos de Río Negro -con sede en General Roca-, que remitió una nota al Concejo Deliberante y al Ejecutivo para pedir que las farmacias de Bariloche no sean alcanzadas por los incrementos de la Tasa de Inspección Seguridad e Higiene (TISH), enmarcados en la nueva normativa.
En ese escrito, el Colegio manifestó que “por la importante incidencia en la rentabilidad del sector” que provocaría el incremento de la TISH, “podría poner en riesgo el financiamiento” de las obras sociales.
En ese sentido, expusieron que “al día de la fecha, existen numerosos planteos de todos los sectores farmacéuticos provinciales y nacionales, con el fin de buscar alternativas o soluciones que logren mitigar la vapuleada rentabilidad. De continuar depreciando la misma, podría ponerse en riesgo el financiamiento en la seguridad social, sobre todo en aquellas obras sociales provinciales y nacionales, que pretenden reducir sus costos con aportes comerciales del sector farmacéutico -que reducen aún más la rentabilidad- y estirar sus plazos de pago”. Y agregaron: “Éso provocaría una ruptura total de la ecuación financiera de éste tipo de convenios”, entendieron.
En tanto, indicaron que “sería atinado y oportuno” que “los funcionarios puedan tomar nota y conocimiento de la difícil situación en la que se encuentra el sector, antes de gravar la actividad o aumentar las alícuotas municipales y provinciales”, puesto que podría “poner en serio riesgo la calidad del servicio farmacéutico”.
En una misma línea, sostuvieron que “hace ya más de cinco años que los precios de los medicamentos no tienen un ritmo de actualización directamente proporcional a los costos de estructura y salariales que demanda la oficina farmacéutica”.
Por ello -agregaron- “a través de estos años, la rentabilidad de las farmacias ha sido absorbida por los costos a un ritmo anual que provocó no sólo el estancamiento en el crecimiento empresarial farmacéutico, sino peor aún, incidiendo negativamente -en numerosos casos- al extremo de no tener ganancias que permitan reinvertir o mantener, al menos, el funcionamiento de las oficinas de farmacias”.
En la nota, elevada a los ediles y a la Secretaría de Hacienda, el Colegio de Farmacéuticos rionegrino informó que mantuvo una reunión con autoridades provinciales (Agencia de Recaudación Tributaria), a fin de reducir la carga tributaria por los Ingresos Brutos que “afectan el 10 por ciento de la rentabilidad bruta del medicamento”.
En ese sentido, presentaron como antecedente a considerar, que “la Provincia ha sabido escuchar nuestros reclamos y ha atenido positivamente con soluciones que se encuentran en curso de ejecución”.
Y acotaron: “Nos sorprende cómo pueden aún subsistir las farmacias, con un margen prácticamente inexistente”.
Finalmente, la cúpula del Colegio de Farmacéuticos de Río Negro, se solidarizó “con todos los farmacéuticos de Bariloche, para que junto a los funcionarios de la localidad puedan encontrar una solución a la problemática planteada que nos perjudica e involucra a todo el sector”. (ANB)