Desde hoy el Pami comenzará a aplicar los nuevos parámetros para el acceso al subsidio social de medicamentos ambulatorios al 100 por ciento. Excluirá del beneficio a los jubilados que tengan prepaga, posean bienes suntuosos (embarcaciones, aeronaves, etc), más de una propiedad y cobre más de 1,5 jubilaciones mínimas, que en La Pampa asciende a 11.500 pesos.
Al día de hoy el beneficio que le garantiza la gratuidad de los medicamentos a los jubilados de PAMI es percibido por 1,6 millones de sus 5 millones de afiliados, pero el cruce de información a través del Sistema de Identificación Nacional Tributario y Social (Sintys) detectó que 50 de los beneficiarios eran propietarios de aviones y 2.000 de ellos cuentan con embarcaciones a su nombre.
Estos datos llevaron al organismo a establecer nuevos parámetros para el acceso al beneficio que fueron equiparados a los establecidos para la tarifa social de servicios públicos.
Los afiliados de Pami que soliciten el subsidio deberán demostrar ingresos iguales o inferiores a una jubilación mínina y media (en La Pampa asciende a 11.500 pesos porque perciben un 40% de zona patagónica); no poseer más de un inmueble, bienes suntuosos, ni prepaga, y no contar con un vehículo de menos de diez años de antigüedad, entre otros requisitos.
De todos modos, existe lo que se llama “vía de excepción”, norma pensada para evaluar casos específicos que rige para toda la administración pública cuando se otorgan subsidios, ya sea para ver quién debe recibirlos, como para detectar a quién no le corresponde.
Las personas que conviven con VIH, cáncer, son trasplantados o insulino dependientes, por ejemplo, tienen una cobertura del 100% en remedios, y eso no se modificará.
En tanto, los medicamentos llamados ambulatorios, que tienen un descuento del 50% y los que son para pacientes crónicos que poseen una reducción del 80%, tampoco se tocan.
La nueva normativa entra en vigencia desde hoy y las revisiones se realizarán de manera progresiva, cada vez que el afiliado deba renovar el subsidio vigente.
Fuente: Diario Textual (Argentina)