“La Revisión del Uso de Medicamentos es un proceso estructurado para optimizar la terapia farmacológica. Los datos emergentes han demostrado sus múltiples beneficios, y los farmacéuticos están llamados a asumir roles de liderazgo en la implementación, conducción y promoción de este servicio”, afirma Gonçalo Sousa Pinto, Director del área de Desarrollo y Transformación de la Profesión de la Federación Farmacéutica Internacional (FIP), y coautor del publicación.
El kit de herramientas sirve como guía de referencia. Los temas organizativos del conjunto de herramientas se pueden utilizar en contextos de gestión y desarrollo de políticas.
La FIP reconoce que se deben cumplir varias condiciones con respecto a los datos, la logística, los sistemas y las relaciones necesarios (es decir, la práctica colaborativa) para garantizar que la RUM sea óptima. Puede haber desafíos en entornos de bajos recursos y para las farmacias pequeñas, pero, según la federación, aún es posible brindar este servicio y lograr mejoras en el uso y la seguridad de los medicamentos. Por ejemplo, el acceso a los perfiles de medicamentos, los datos de investigación, la información clínica y la documentación se puede lograr sin un software elaborado, y los gráficos en papel también se pueden organizar y utilizar. La participación de los pacientes para recopilar información, así como para reforzar la adherencia y la educación, se puede hacer en persona y requiere pocos recursos materiales o tecnológicos.
“La RUM dirigida por farmacéuticos es una solución para garantizar la seguridad del paciente al reducir el riesgo de errores de medicación y efectos adversos. Las herramientas de esta caja de herramientas están listas para ser utilizadas directamente o adaptadas a las prácticas locales. Con respecto al desarrollo de políticas y prácticas, este conjunto de herramientas también está destinado a respaldar el desarrollo nacional y local de RUM óptimos dirigidos por farmacéuticos”, señala el Farm. Sousa Pinto.