El consumo de complementos vitamínicos que no sean debidamente recetados puede ser perjudicial para la salud. Según un relevamiento que hizo EL LIBERAL en algunos gimnasios y locales comerciales se venden libremente estos suplementos para recuperar la energía desgastada en la actividad física.
Ante este panorama peligroso el cardiólogo y deportólogo Héctor Trungelliti sostuvo: “No se debería tomar vitaminas, así como ninguna otra sustancia, si no prescribe el médico. Porque los suplementos vitamínicos son elaborados para suplir el déficit de vitaminas y para eso es necesario un diagnóstico”.
Muchas veces las personas que concurren a los gimnasios que quieren lograr grandes resultados en poco tiempo ingieren este tipo de medicamentos, que según se supo se consiguen hasta en páginas de internet. En la mayoría de los casos, son los hombres los que deciden consumirlos y el boca en boca es la forma en que se aconseja erradamente.
“Son sustancias extrañas al organismo, que cuando uno las ingiere modifican las condiciones y el organismo puede rechazarlos y tener efectos adversos, traer consecuencias importantes, si no están prescriptas adecuadamente”, recalcó el médico.
En cuanto a las sustancias que se venden en los gimnasios, Trungelliti dijo que “tampoco deberían ingerirse si no están indicados por el médico, porque no está probado que estas sustancias hagan bien. Algunas pueden no hacer efectos y otras pueden causar daños. Incluso muchas de ellas no tienen la composición que esté aclarada en la etiqueta. Muchas dicen que tienen carbohidratos, pero no especifica qué tipo”.
Graves consecuencias
Las altas dosis de vitaminas y minerales en algunos suplementos presentan otro peligro. Las personas que toman más de la dosis recomendada de un nutriente podrían tener reacciones adversas.
“En general, se prescribe aminoácidos o algún otro suplemento cuando se comprueba que el paciente lo necesita. La carga excesiva de aminoácidos puede dañar, por ejemplo, los riñones. Algunas consecuencias son muy graves. Pueden poner en riesgo la salud el hecho de consumir estas sustancias”, resaltó el deportólogo.
Asimismo, hizo hincapié en que la actividad física debe estar acompañada por un plan de nutrición acorde a cada persona, según las condiciones de su organismo. “Se toman esos suplementos pensando en que la masa muscular va a aumentar y tener más fuerza. La mayoría de las veces no hace falta eso, es más importante tener un plan alimentario adecuado, hecho por un especialista en nutrición que comprar estos suplementos”, aconsejó.
Un aspecto muy importante para tener en cuenta si se llega a ofrecer esta sustancia es que algunas no están autorizadas y, por lo tanto, son de dudosa composición. “No todos estos suplementos que se comercializan están autorizados por la Anmat – organismo que supervisa y controla en la venta de sustancias y medicamentos que las personas ingieren-. Que sea de venta libre no quiere decir que sea acreditado”, remató Héctor Trungelliti.
La dieta junto con entrenamiento controlado y un descanso de 8 horas lograrán grandes resultados sin ingerir componentes tóxicos.
Fuente: El Liberal