Hacemos conocer a las farmacias el estado de situación del convenio de provisión de medicamentos a los afiliados del PAMI.
Una parte sustancial de este problema se centra en la provisión de Insulinas y Tiras Reactivas, productos imprescindibles para la población de pacientes diabéticos del PAMI, que han entrado desde enero del presente año en una creciente deuda que significa para las farmacias no haber cobrado aún productos entregados sin cargo a los jubilados en el mes de febrero pasado. Es decir, insulinas o tiras reactivas que la farmacia compró, pagó y entregó en febrero al paciente jubilado, hoy en junio, 100 días después, aún no ha cobrado.
Por estos segmentos de Tiras e Insulinas el PAMI ha acumulado una deuda nueva con las farmacias, desde el mes de enero a la fecha, del orden de los 600 millones de pesos.
El problema se agudiza aún más ya que por la prestación de medicamentos habituales y de entrega al 100% a los jubilados, el PAMI adeuda a las farmacias una suma aproximada a los 1.200 millones de pesos, lo que hace una deuda global cercana a los 2.000 millones de pesos que mantiene el Instituto con las farmacias prestadoras de todo el país.
Las autoridades del PAMI han escuchado nuestros reclamos y nuestro claro planteo del estado de situación pero no hemos encontrado ninguna solución, por el contrario, si realizamos una proyección a corto plazo del problema podemos avizorar un agravamiento aún mayor de este panorama, lo cual directamente hará imposible continuar con la prestación de medicamentos a los jubilados, ya que actualmente el Instituto dispone de un presupuesto para medicamentos sustancialmente menor a la facturación que se le presenta mensualmente por la entrega de la medicación a sus afiliados. Durante el mes de mayo que acaba de terminar la deuda del PAMI con las farmacias se incrementó en 120 millones de pesos.
Si bien son las farmacias las que siguen poniendo su esfuerzo financiero y económico para proveer de medicación a los pacientes jubilados, este esfuerzo tiene un límite, y ese límite es la propia sustentabilidad económica de la farmacia, su existencia misma.
Ante las limitaciones presupuestarias argumentadas por el PAMI, que no alcanzan para cubrir el actual consumo mensual de medicamentos de parte de sus afiliados, lo que impide no solo que se pague la deuda con las farmacias sino que genera un incremento sostenido de ella, es que apelamos a que el Gobierno nacional acuda en auxilio económico del Instituto para dar una solución a este gravísimo problema que afecta a las farmacias y que ineludiblemente afectará a los jubilados en una de sus más esenciales necesidades que es la preservación de su salud.
Nos enfrentamos las farmacias a una situación de extrema gravedad que requiere de una toma de conciencia de parte de las autoridades, de su rápida respuesta y de definir cuál es la prestación de medicamentos que se pretende para nuestros compatriotas jubilados, con la debida calidad para el paciente y en un marco de sustentabilidad para las farmacias.
Desde el miércoles se han sucedido una serie de reuniones entre el Instituto y la Industria Farmacéutica (y entre la Industria y las Entidades Farmacéuticas) donde se han expresado las distintas posiciones. A raíz de esta situación límite en la que se encuentra el convenio es que ha tomado cartas en el asunto el propio Presidente Macri habiéndose comprometido a dar una respuesta para la continuidad de la prestación a comienzos de la próxima semana.